1. Aplicación óptima: Usa una cantidad moderada y masajea suavemente en el área afectada hasta que se absorba por completo.
2. Mejor momento: Aplica después de actividades físicas intensas o al final del día para aliviar tensiones musculares.
3. Masajes terapéuticos: Para potenciar sus efectos, úsala durante masajes localizados en músculos adoloridos o inflamados.
4. Evita zonas sensibles: No apliques en heridas abiertas, mucosas o áreas irritadas.
5. Uso frecuente: Para mantener flexibilidad y comodidad, úsala de forma regular, especialmente en áreas propensas a molestias.
6. Complementa tu rutina: Combina su uso con estiramientos suaves y descansos adecuados para una recuperación completa.
7. Prueba de sensibilidad: Antes de usar por primera vez, prueba en una pequeña zona para asegurarte de que no cause irritación.